VALLADOLID, 19 (EUROPA PRESS)
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Isabel Blanco Llamas, reclama hoy en una reunión con la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, la gestión «total» del Ingreso Mínimo Vital (IMV) por parte de la Comunidad, una cesión que se reclama en unas condiciones idénticas a las que tienen el País Vasco o Navarra.
Blanco Llamas ha anunciado este encuentro, que tiene lugar en la sede del Ministerio, antes de participar en el acto de celebración de 20 aniversario de la plataforma de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN), donde ha defendido que tanto el IMV como la Renta Garantizada de Ciudanía deben estar vinculados a la inclusión laboral de las personas «más necesitadas».
«Los servicios sociales son la puerta de entrada para todas estas personas pero también debe ser la puerta de salida para normalizar su vida, su día a día, y eso pasa por encontrar un empleo, trabajar, encontrar una vivienda y normalizar la situación», ha defendido Blanco Llamas.
De este modo, ha insistido en que estas prestaciones deben estar ligadas a la búsqueda activa de empleo y a la escolarización de los menores de las familias vulnerables. «Entendemos que esta es la mejor manera para romper situaciones de pobreza», ha defendido la consejera, quien ha afeado que actualmente el IMV no está vinculado «a nada» y, además, está «mal gestionado» por el Gobierno de España.
De este modo, Castilla y León defiende la «igualdad» de condiciones con otras autonomías y esto será lo que pedirá la consejera en la reunión prevista para este miércoles. «Queremos las mismas condiciones que tienen el País Vasco o Navarra que son las dos autonomías que ahora lo tienen trasferido», ha insistido.
Por último, Blanco Llamas ha afeado la existencia de autonomías «de primera y de segunda». «Nosotros siempre vamos a defender a Castilla y León y a las personas de Castilla y León y los intereses de Castilla y León frente a un gobierno Gobierno que quiere marcar diferencia con una financiación desigual que privilegia a unos por encima de otros», ha zanjado.
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