En La Rioja hay más de 7.000 donantes pero ha bajado el índice de donación
LOGROÑO, 2 (EUROPA PRESS)
El director gerente de la Fundación Rioja Salud, Juan Carlos Oliva, ha hecho un llamamiento para hacer frente a las 2.000 transfusiones de sangre que se va a necesitar este verano, con una campaña extraordinaria que coincide con un momento de bajada en el índice de donación.
Oliva se ha desplazado, junto al director técnico del Banco de Sangre, Carlos Sola, a la Unidad Móvil del Banco de Sangre ubicada en Avenida de la Solidaridad de Logroño, uno de los más de 140 puntos de donación repartidos por más de cincuenta municipios de La Rioja que se pondrán este verano.
En declaraciones a los medios de comunicación, ha empezado por agradecer «esa actitud colaborativa, ejemplar y solidaria de todos los riojanos cada vez que» se hace «un llamamiento a donar».
A continuación, ha señalado cómo, ante el comienzo del periodo estival, se necesita «la ayuda de nuestros donantes para poder hacer frente a las 2.000 transfusiones de sangre que, en base a lo que ha acontecido otros años, sabemos que vamos a necesitar».
Son donaciones, ha relatado: «Para poder atender a nuestros pacientes oncológicos, para poder llevar a cabo toda la actividad y la planificación quirúrgica programada, pero también, para hacer frente a situaciones excepcionales, como pueden ser las emergencias sanitarias, accidentes de tráfico o partos complejos».
Para poner llevarlo a cabo, el Banco de Sangre de Fundación Rioja Salud, a lo largo de los meses de julio, agosto y septiembre, va a poner a disposición de los donantes más de 140 puntos repartidos por más de cincuenta municipios de La Rioja. Además, estará siempre disponible el punto de donación fija en el Hospital de San Pedro.
Se trata de una campaña extraordinaria y, para Oliva, «no hay mejor forma de comenzar las vacaciones que animando a los donantes y, en general, a todos los ciudadanos a realizar una donación de sangre para estas otras personas que lo van a necesitar durante el verano».
Sola, por su parte, ha animado a los donantes que, antes o después de salir de viaje, «sobre todo mejor antes porque hay lugares de España donde si viajamos luego estamos 28 días sin poder donar, saquen un poquito de tiempo y acudan a donar sangre».
BAJADA EN LA FRECUENCIA DE DONACIÓN
«Es esencial», ha subrayado, «para mantener la actividad del hospital, ante situaciones programadas y situaciones urgentes». Así, ha dicho, en esta época del año hay más accidentes de tráfico y, también, «desplazamientos que hacen que la gente no esté aquí para poder donar».
En La Rioja hay más de 7.000 donantes; un número «bueno», pero, ha indicado, hace falta que «se acerquen a donar» porque «el problema» que se está produciendo es «la baja frecuentación».
Así, «ha bajado el índice de donación en los últimos años de 1,45 o 1,32 y, aunque parezca poco», ha resaltado, «es un número que sí que es significativo».
De este modo, ha animado a los donantes «a que se marquen en el calendario dos fechas en el año, por ejemplo, la del mes de su cumpleaños y seis meses después». En este momento, las mayores necesidades son el cero positivo y el cero negativo.
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